En el artículo de hoy te llevamos a un monasterio con mucha historia 📜. Nos vamos hasta Galicia, amigui, concretamente a la provincia de Lugo 📍, porque allí nos espera el impresionante Monasterio de Samos ⛪, una parada imprescindible si estás haciendo el Camino de Santiago 🥾.

Ubicado en un entorno incomparable 🏞️, bañado por el río Sarria que corre rozando sus muros, su sencillez contrasta con la belleza de su interior. ¿Estás ready para conocer el monasterio habitado más antiguo de España? 😮 Vente con nosotros, que con las fotos del Monasterio de Samos que te vamos a enseñar, te van a entrar unas ganas tremendas de ir a conocerlo, pero ya 😇.

Dónde está el Monasterio de Samos

Bueno, ya te lo hemos avanzado, pero por si acaso te recordamos que estamos en Galicia, en la provincia de Lugo 😜. El Monasterio de Samos está ubicado en el municipio de Samos y pertenece a la parroquia de Santa Gertrudis.

Curiosidades del Monasterio de Samos

Cuando visitamos el Monasterio de Samos descubrimos alguna de sus curiosidades, y no podemos evitar compartirlas contigo 😊. Ahí van:

• Es el monasterio habitado más antiguo de España. Sí amigui, el Monasterio de Samos es el monasterio más antiguo de nuestro país en el que todavía siguen viviendo monjes 😲.

• Es un monasterio mixto. Como te decíamos antes, el Monasterio de Samos sigue habitado y una de las cosas que nos llamó la atención es que actualmente en él viven 11 monjes y 1 monja.

• No se fundó como monasterio benedictino. Aunque mucha gente cree que es un monasterio benedictino, no es así. Los monjes que viven en él sí que lo son. Parece ser que la regla de San Benito se adoptó a mediados del siglo X, pero el monasterio es bastante anterior. Se cree que los primeros religiosos que se asentaron en este lugar fundaron el monasterio en el siglo VI bajo la regla de San Martín Dumiense 📜.

• No siempre se ha llamado Monasterio de Samos. Durante varios siglos a este cenobio lo llamaban Monasterio de Sámanos 🤓. Parece que es un nombre de ascendencia visigótica, que con el paso del tiempo quedó reducido a Samos. Y quizá no te suene tanto, pero su nombre completo es Monasterio de San Julián de Samos. También se le conoce como Real Abadía de San Julián o de San Xián (que es el nombre de Julián en gallego).

• Puedes ver las caras de actores conocidos en sus pinturas murales. Cuando nos enteramos de esto nos pareció curiosísimo 😮. Resulta que en las pinturas murales del Claustro de Feijoo hay algunos personajes que te pueden recordar a actores de renombre como Sofía Loren, Charlton Heston o la mismísima Sara Montiel 🎥.

• Hay quien afirma que aquí podría estar enterrado Hitler. Buscando información sobre el Monasterio de Samos nos encontramos con este artículo de Vice que nos dejó alucinando en colorines 😵‍💫. Resulta que Julio Barreiro Rivas, un escultor y cantero especialista en túneles secretos afirma que Hitler y su mujer no se suicidaron, sino que acabaron viviendo en el Monasterio de Samos y que cabe la posibilidad de que estén enterrados en sus catacumbas 🪦. Lee el artículo, que no tiene desperdicio.

Un poquito de historia sobre el Monasterio de Samos

Tranqui, que no nos vamos a poner pesados, solo te damos unas pinceladas para que entiendas un poquito más sobre este lugar 😇. Antes de nada, que sepas que está declarado Bien de Interés Cultural.

El Monasterio de Samos se fundó sobre el siglo VI 🏗️, durante la época de los suevos y visigodos, bajo la Regla de San Martín de Dumio y se refundó un siglo después bajo la Regla de San Fructuoso. La fecha exacta no se sabe, pero sí que es seguro que fue antes del siglo VII porque una lápida de mediados de este siglo afirma que lo restauró el obispo de Lugo Ermefredo.

En el siglo VIII los monjes abandonaron el monasterio durante la dominación musulmana y, cuando se retiraron, lo ocuparon mozárabes que venían huyendo de Al-Ándalus durante el reinado de Fruela I. Su hijo, Alfonso II, se crio en el monasterio junto a su hermana Jimena cuando asesinaron a su padre. Y fue el que le dio el nombre de Real Abadía, ya que en él residió un rey 👑.

Las primeras comunidades que habitaron el lugar se regían por reglas hispanas como las de San Fructuoso o San Isidoro, y a partir del siglo X comenzaron a regirse por la Regla de San Benito.

Su situación en pleno Camino de Santiago hizo que fuera el lugar ideal para que los peregrinos pudieran descansar 💤. Pero su momento de mayor esplendor corresponde al siglo XVI, cuando la comunidad benedictina de Samos pasa a pertenecer a la Congregación de la Observancia de Valladolid. Reyes, nobles, obispos y artistas escogieron este monasterio 🔝.

Durante el siglo XIX el Monasterio de Samos se convirtió en hospital de guerra durante la invasión francesa y la Desamortización de Mendizábal hizo que los monjes tuvieran que abandonar su casa 🫤. Pero no se dieron por vencidos, en el año 1880 nueve monjes vinieron desde Valladolid, restauraron los muros del monasterio y volvieron a habitarlo hasta la actualidad 👌.

En el año 1951 hubo un incendio 🔥, en el que, entre otras cosas, se perdió casi la mitad de los libros de la biblioteca 📚.

Visita al Monasterio de Samos

Ahora que ya te hemos dado unas pinceladas sobre la historia de esta pasada de monumento, vamos a contarte todo lo que puedes ver durante tu visita al Monasterio de Samos.

Exterior del Monasterio de Samos

Te recomendamos que empieces tu visita al Monasterio de Samos alucinando con su exterior, si te da tiempo claro. Nosotros fuimos con un poco de tiempo para poder ver con el monasterio antes de hacer la visita guiada. Nos quedamos flipando en colorines en cuanto lo tuvimos delante de nosotros. ¡Es impresionante! 😮 Y es que no es para menos, porque sus edificios ocupan la friolera de 14.000 metros cuadrados, ¡flipa!

Una mezcla de estilos gótico, renacentista y barroco te está esperando. Bueno, que sepas que también hay alguna cosita románica, pero muy poquitas, una portada y par de elementos más 📝.

Interior del Monasterio de Samos

El interior del Monasterio de Samos solo se puede visitar con una visita guiada. La harás con uno de los monjes que viven en el monasterio.

Una de las primeras cosas que tienes que saber cuando visitas el Monasterio de Samos es que en su interior todavía habita una comunidad de monjes. Así que sé respetuoso y no hagas nada que pueda molestarles 🙏. Ten en cuenta que te están abriendo las puertas de su casa y estás en un lugar de retiro y oración. Así que haz caso de todo lo que te digan los monjes y, sobre todo, no hagas ruido 🤫.

1. Los claustros del Monasterio de Samos

Nada más pasar la puerta accederás a uno de los claustros del Monasterio de Samos. Que sepas que tiene dos claustros, que están unidos entre ellos. A cada cual más bonito 🤩.

El Claustro de Feijoo

También se le conoce como el Claustro Grande y que sepas que tiene el honor de estar considerado como uno de los claustros más grandes de España. Tiene 3 plantas y mide 54 metros y medio de lado, ¡flipa! 😵‍💫

Se construyó en el siglo XVII en estilo herreriano. En el centro del claustro está la figura del Padre Feijoo. Recorriéndolo puedes ver los escudos reales de Carlos V como rey de España y el de los Austrias a partir de Felipe II.

El Claustro de las Nereidas

Este se construyó antes, en el siglo XVI y también se le conoce como Claustro Pequeño. Se llama así porque en el centro puedes ver una fuente barroca del siglo XVIII en la que hay 4 nereidas sosteniendo la copa ⛲, un personaje mitológico de lo más curioso.

Hay varios puntos interesantes en los que te tienes que fijar cuando pasees por este claustro. Toma nota, que te los chivamos.

La única puerta románica del Monasterio de Samos

El Claustro de las Nereidas se construyó sobre un claustro románico que se cargó un incendio 🔥. De la época del románico apenas quedan cositas en el monasterio, pero en este claustro puedes ver la única puerta original que resistió al fuego. Es del siglo XII y era la entrada lateral a la iglesia 🚪.

Una escalera muy chula

Lo siguiente que te vas a encontrar si caminas un poquito por el claustro es un arco renacentista que da paso a una escalera neogótica impresionante. Está labrada en piedra y se hizo para sustituir la que se cargó el incendio. Como curiosidad, que sepas que la diseñó un monje de la comunidad 😜.

Su fecha de construcción la puedes ver en la clave del busto de San Benito que está en el tramo de bóveda de delante de la puerta del refectorio. Dice claramente que se empezó en 1562 y se terminó en 1852.

Mensajito para despistados: ¿qué miras bobo?

Quizá te suene la frase porque Leo Messi la dijo en pleno mundial de Catar 🤣, pero que sepas que esta frasecita está pintada en un medallón de piedra del Monasterio de Samos desde el siglo XVI. ¿Quieres que te chivemos cómo encontrarla? 🔎

Pues para verla tienes que mirar hacia el techo en el Claustro de las Nereidas 👀. Se le atribuye al maestro cantero Pedro Rodrigues, que era de Monforte de Lemos y reconstruyó el claustro entre los años 1562 y 1582 bajo el mecenazgo del conde de Lemos. No la hizo para llamarte bobo, sino para que no te distraigas durante tu visita mirando al techo cuando tienes otras cosas más interesantes delante de tus narices, jeje 🤭. Aunque en realidad en su origen seguro que estaba más pensada en los monjes, para darles un toquecito de atención si se distraían.

La Fuente de las Nereidas

Esta es la fuente que da nombre al claustro. La verás en el centro del jardín, que es el símbolo del Paraíso. La idea de esta fuente barroca es de un monje que vivió en el monasterio a principios del siglo XVIII, Juan Vázquez. Y es de lo más chula 🤩.

Por si no lo sabes, te contamos que las nereidas son unos personajes de la mitología griega muy curiosos. Son mitad humanas y mitad pez, como las sirenas 🧜‍♀️, pero las diferencia una cosita. Resulta que las sirenas usaban su voz para engañar a los hombres y las nereidas les cautivaban con sus atributos femeninos. Después de saber esto quizá te choca un poco que estén de protas en el claustro, jeje. Pero es que resulta que, en la época en la que se construyó, los elementos paganos estaban de moda, así que los monjes no pusieron pegas 🤓.

2. La botica del Monasterio de Samos

Otro de los rincones molones del Monasterio de Samos es su botica 🌱. Este lugar era muy importante, no solo para la comunidad de monjes que vivía en el monasterio, sino para los vecinos de Samos.

Los boticarios del Monasterio de Samos eran unos grandes conocedores de las plantas medicinales. Algunas de ellas se cultivaban en el propio jardín de la botica y habían llegado de lejos, así que tenían que tener un cuidado especial. En la botica de Samos hay alambiques, pesos, básculas, tarros de cerámica de Talavera de la Reina y se conservan también libros de fórmulas curativas 📖.

3. Las pinturas murales del Claustro de Feijoo

Cuando subas al primer piso vas a flipar aún más con este claustro. Sus pinturas murales son una pasada.

Son de los pintores Celia Rodríguez Cortés, Joan Parés, José Luis Rodríguez y Enrique Navarro 🎨. Las hicieron después del incendio de 1951 🔥, que se cargó los cuadros que adornaban las paredes del claustro. Empezaron a pintarlas en 1957 y cada uno de ellos se centró en una temática.

La primera pintura que nos encontramos fue la de un incendio imaginario con la que el diablo busca asustar a los monjes 👹. Es de Celia Cortés y una de las cosas más curiosas de esta obra es el juego de perspectivas. Verás que según el punto en el que te pongas cambiará la perspectiva del claustro 👀.

El nacimiento de San Benito y sus primeros pasos en la vida monástica son obra de José Luis Rodríguez 🧑‍🎨. Y El Milagro de Santa Escolástica mientras hablaba con su hermano San Benito es del madrileño Enrique Navarro 🖌️.

Si continúas visitando el claustro verás otros murales que hacen referencia a la curación de un endemoniado, a San Benito escribiendo su Regla ✏️, la curación de un leproso, al santo entregando la Regla y su muerte entre las manos de sus discípulos que no quieren que se muera. Son todas chulísimas 😍.

Y como curiosidad, que sepas que entre estas pinturas puedes encontrar a actores si buscas bien 🔎. Sí amigui, uno de los ángeles se parece un montón a Sofía Loren, un hombre a Charlton Heston y si buscas bien una de las monjas te puede recordar a Sara Montiel. Búscalas entre las pinturas de José Luis Rodríguez 😜.

4. La sacristía

Otro de los sitios que podrás ver durante la visita guiada al Monasterio de Samos es la sacristía. Justo antes de entrar hay un espacio al que se conoce como Signo. Fíjate en su bóveda del siglo XVI, en las pinturas al fresco con escenas de la vida de Jesucristo y en su fuente barroca policromada ⛲.

La sacristía es del siglo XVIII y tiene planta octogonal. Los muebles y la mesa central nos llamaron la atención pero, si miras al techo, su cúpula también se las trae 😯.

Que sepas que entre otras cosas, aquí guardan como reliquia un fémur de San Benito, un Lignum Crucis superantiguo y una espina de la Corona del Señor.

5. La Iglesia del Monasterio de Samos

La Iglesia del Monasterio de Samos es del siglo XVIII. Se construyó entre los años 1734 y 1748 y es barroca, aunque te parezca que tiene más de neoclásico por su austeridad. Seguro que una de las cosas que te llama la atención es que no tiene torres. Resulta que no está terminada amigui 😜.

Encima de la puerta de entrada puedes ver a San Benito y las dos figuras del cuerpo central son las de San Julián y Santa Basilisa, que son los patrones del monasterio. La escalera de acceso al templo nos recordó un poquito a la de la Plaza del Obradoiro de la Catedral de Santiago ⛪.

La Iglesia del Monasterio de Samos es un templo de cruz latina de tres naves y una de las cosas que tienes que hacer cuando visites su interior es mirar hacia arriba 👀. Vas a flipar con la pedazo de cúpula que hay en el crucero.

Flanqueándola puedes ver los relieves de los doctores marianos benedictinos San Ruperto, San Bernardo, San Anselmo y San Ildefonso. Cuando puedas bajar la cabeza, acércate al centro del templo y flipa con el altar 😮.

¡Ah! Y ojito con el órgano 🎹, que es uno de los más grandes de Galicia. ¡Tiene casi 4.000 tubos!

Leyendas sobre el Monasterio de Samos

Estamos en Galicia, amigui, tierra de leyendas 📜, y obviamente este lugar tiene unas cuantas. Te chivamos algunas de las leyendas del Monasterio de Samos que más nos han gustado.

La leyenda del ciprés

Muy cerquita del monasterio, donde está la Ermita de El Salvador, hay un ciprés milenario 🌲. Mide más de 25 metros. Y es un árbol que… ¡te quita el dolor de pies! 🦶 Sí amigui, la leyenda dice que «quien da un abrazo al ciprés llega a Santiago sin mal de pies». ¿Lo has probado? 🙄 Nosotros lo descubrimos después, así que tenemos que volver.

La leyenda de la Fuente de las Nereidas

Aunque te hemos dicho que los monjes no tuvieron problemas con tener aquí esta fuente ⛲, resulta que hubo un momento en el que la autoridad eclesiástica consideró que estas figuras no tenían que estar en un sitio tan visible y ordenó trasladar la fuente a otro lugar. ¿Sabes qué pasó? 🤔 Pues que cuando la desmontaron y se disponían a mover las piedras empezaron a pesar tanto que no hubo forma de moverlas de aquí.

Cuando vieron que no había forma de moverlas, decidieron dejarla en su lugar y al volver a montarla las piedras recuperaron su peso normal milagrosamente 😮.

Información práctica para organizar tu visita al Monasterio de Santos

Como te hemos comentado antes, solo puedes recorrer el interior del Monasterio de Samos con una visita guiada en la que podrás conocer alguna de las partes de este maravilloso lugar 😊.

Horario de visitas al Monasterio de Samos

Puedes visitar el monasterio todos los días de la semana, pero el horario de visitas cambia en función del día. Toma buena nota:

• De lunes a sábado puedes ver el monasterio a las 10:00, 11:00, 12:00 y 16:30.
• Los domingos y festivos solo hay dos horarios disponibles, a las 12:45 y a las 16:30.

Por si te interesa, que sepas que el horario de misas es a las 19:30 de lunes a sábado en el oratorio. Los domingos la misa se celebra en la iglesia del monasterio y es a las 12:00 de la mañana.

Precio de la visita al Monasterio de Samos

La visita al Monasterio de Samos cuesta 5 euros 💰. Pero ten en cuenta una cosita. Con esta cantidad estás contribuyendo al mantenimiento del monasterio y de la comunidad de monjes que viven en él. Si además de ver un sitio chulo, les ayudas, pues mejor que mejor, ¿no crees? 😜

¿Qué ver cerca del Monasterio de Samos?

Lo primero que tienes que ver cerca del Monasterio de Samos es el pueblo en el que se encuentra 🏘️, Samos. Tiene muchas más cosas de las que te imaginas, entre ellas una senda desde la que tendrás unas vistas del monasterio de lo más molonas. En este otra artículo te contamos que ver en Samos para que no te dejes nada durante tu visita.

Como te decíamos, el monasterio está ubicado en pleno Camino de Santiago, así que entre los sitios que puedes ver cerca del Monasterio de Samos está O Cebreiro y también Sarria, que se encuentra tan solo 12 kilómetros. Si visitas Sarria no te olvides de pasar por la Panadería Pallares 🫓, su museo es una chulada, pero es que tienen unas empanadas y unos dulces para chuparte los deditos sin parar 😋.

Otros rinconcitos que no te pillan muy lejos del Monasterio de Samos y que nos gustan mucho son A Ferrería do Incio 🛁, un pueblecito encantador de la España Vaciada o la magnífica Iglesia de Hospital do Incio 😍.

A menos de una hora de coche tienes lugares tan chulos como Monforte de Lemos o Portomarín. Y si quieres seguir viendo cosas chulas, te recomendamos que eches un vistazo a nuestra sección qué ver en Galicia 👀.